Golpe para algunos conductores inmigrantes

Quienes sacaron sus permisos de manejo en ese estado y no viven allá, no podrán usar más este documento.

Si usted reside en Georgia y conduce con una licencia de Nuevo México, podría ser arrestado. Las autoridades suspenderán el documento de identidad a todo aquel que viva fuera del estado.

La gobernadora de Nuevo México, Susana Martinez, giró a finales del mes pasado una orden al Departamento de Motores y Vehículos (DMV) para que verifique si los inmigrantes que obtuvieron una licencia sin presentar un número de Seguro Social están todavía en ese estado.

El DMV anunció que a partir de la primera semana de agosto enviaría unas 10 mil cartas pidiéndole pruebas de residencia en Nuevo México a quienes usaron su identificación tributaria (Tax ID) para sacar la licencia.

Las personas que reciban la misiva tendrán un lapso de 30 días para acudir al DMV con recibos de servicios, estados bancarios o contratos de renta. Quien no se presente en el tiempo indicado y con los documentos necesarios perderá su licencia de conducir automáticamente.

Martinez, la primera mujer hispana en ser gobernadora de Nuevo México, argumentó que la práctica de otorgar licencias a “cualquiera” convirtió su estado en un imán para los “inmigrantes ilegales” de todas partes de EE.UU.

Por ello, en la pasada sesión legislativa, la gobernadora trató de derogar la ley estatal que no requiere de residencia legal para otorgar licencias, vigente desde 2003, pero su plan fracasó al no obtener el respaldo suficiente entre los políticos.

No obstante, Martinez y las autoridades de Nuevo México aumentaron sus esfuerzos para detectar a individuos sospechosos de “abusar del sistema”.

De acuerdo con medios locales, tan solo en marzo pasado presentaron cargos contra cuatro personas que cobraban 6 mil dólares por conseguirle comprobantes de residencia en Nuevo México a extranjeros que buscaban obtener licencias.

Preocupación

“Confío en Dios de que no me van a cancelar mi licencia. Él bien sabe que la necesito”, declaró un joven hispano que vive en Norcross y que maneja con licencia de Nuevo México, al enterarse de lo que está ocurriendo allá.

La fuente, que pidió mantener su identidad en el anonimato, declaró que obtuvo el documento el año pasado y que viajó hasta Nuevo México por más de 24 horas, junto con otras ocho personas que también querían el permiso de manejo.

“Lo que pasa es que nadie quiere caer preso por no licencia”, reconoció el joven, quien se dedica a la jardinería.

Otras dos personas que están en su misma condición también coincidieron que fueron hasta Nuevo México a solicitar licencia con tal de no verse envueltos en problemas con la policía aquí.

“Con esto de que en todos lados deportan a la gente que agarran sin licencia, lo mejor era rebuscarse para sacar una aunque sea de otro estado”, declaró un señor de origen mexicano.

“Me va tocar llamar a mi contacto en Nuevo México para que me tenga informado si llega alguna carta para mí”, manifestó la fuente.

Repercusiones

Emplear licencias de otro estado es una práctica común entre los inmigrantes indocumentados.

Y es que, a diferencia de una licencia de otro país, un permiso de conducir de cualquier estado de EE.UU. le permite al policía obtener el récord del portador. Con ello, la persona propietaria de la licencia tiene menos riesgo de que se le arreste.

Sin embargo, el conductor podría enfrentar penalidades severas si su licencia fuera revocada. Bajo las leyes de Georgia, manejar con una licencia suspendida tiene repercusiones más graves que conducir sin licencia, pues básicamente se considera que el conductor irrespeta una prohibición de ir tras el volante.

Además, la ley considera residente del estado a toda persona que lleva más de 30 días aquí y lo obliga a cambiar su licencia por una local, lo cual es imposible para el que no tiene su estatus legal en regla.

Algunos motoristas que viven en Georgia y conducen con licencias de otros estados declaran, al ser detenidos, que solo están aquí de paseo. Pero esta maniobra puede ser descubierta si el oficial verifica las placas o el seguro vehicular y descubre que el conductor registrado como propietario del auto vive en Georgia.

De este modo, las autoridades efectúan arrestos de personas que viven en Georgia y que presentan licencias de otros estados, aunque algunos oficiales solamente imponen multas a los infractores.

Pero la infracción no significa salvación. La SB350, una ley estatal vigente desde el 2008, estipula que quienes manejan sin licencia deben de presentarse en la corte, donde un juez ordena su encarcelamiento. Ello los expone a ser detectados como indocumentados.

Además, el policía podría presentarle cargos al infractor por proporcionar información falsa a un agente de la ley. Esto último es una felonía, lo que agrava la situación.


Identificación polémica

» En Nuevo México se estima que unos 85,000 inmigrantes indocumentados han tramitado su licencia de conducir desde 2003.

» Los estados de Nuevo México y Washington son los únicos del país que todavía otorgan licencias a conductores “sin papeles”.

» Los detractores de esta práctica alegan que las licencias dan a los inmigrantes indocumentados permiso para residir en el país, ya que con ellas pueden viajar, abrir cuentas bancarias y obtener otros beneficios.

» Maryland y Utah eran otros estados que antes daban licencias a indocumentados, pero suspendieron este beneficio. En Maryland, por ejemplo, las autoridades descubrieron en 2009 que más de 200 solicitantes habían utilizado la misma dirección en un mismo año, lo que consideraron fraude.